Podríamos volar…
Si tuvieramos aspiraciones y sueños tal vez podríamos conseguirlos, pero si no hay ni siquiera eso, qué puede ser de nuestras vidas? A mi modo de ver, vidas sin retos, vidas muertas…
Hace un poco más de un año, decidí aportar para cambiar la vida de una mujer de 28 años que conocí cuando se acercaba a los 12, en esos años hacía parte de un grupo de pastoral juvenil al cual me uní (mi hermano mayor hacia parte de la dirección de este) luego de dejar otro en el que era líder y al que ingresé dos años antes de terminar el colegio.
Para los que me han conocido en los últimos años no imaginan ese -en extremo social- pasado, que acabó por mi radical escepticismo (ahora en lo único que creo es en la gente, no se si sea ahora más inocente jajajaja) y convencimiento de que el asistencialismo es lo peor para una comunidad. Sin embargo, el servicio social es algo que poco se nota pero que no deja de estar presente.
Sin apartarme del hilo, ese aporte que mencioné líneas arriba no es regalando mercados o dinero o contratándola -a la mencionada mujer- para servicios domésticos. Ese aporte es diferente, nunca pensé en dedicarme a los más vulnerables o «necesitados» o dar la vida por los demás en todo el sentido de la palabra para trabajar tiempo completo o crear una Organización sin Ánimo de Lucro (Aunque ya pasé por esa etapa), pero qué tan diferente es esto que hago? Espero que mucho.
Esa mujer llegó a casa de mis padres con una muñeca de trapo para regalársela a mi sobrina, le pregunté acerca de los canales que usaba para lograr venderlas -claro en otras palabras- ella respondió que a la gente que conocía y aquellas personas que recibían recomendaciones, luego de un par de reuniones más establecí que las aspiraciones era lograr un puesto -en la calle- para tenerlas allí y venderlas en Suba (localidad de Bogotá) o en algún lugar de mucha concurrencia. Con esto claro, le propuse que cambiáramos el diseño, que creáramos características específicas que diferenciaran el producto, que las vendiéramos a través de internet, que ideáramos una marca y una historia detrás de todas ellas, teniendo en cuenta que las que hay en el mercado son casi un «commodity».
Por supuesto supondrán que esto era como hablar en Mandarín para ella, a lo que respondió «lo que digas, no conozco nada de eso», le dije comencemos y las frases que verán a continuación muestran la brecha inmensa que hay entre ese conocimiento empírico lejano a la escolaridad y muy cercano a la experiencia de su entorno.
Seguro que el nuevo diseño le va a gustar a alguien?
A mi no me gustan mucho estas nuevas muñecas
La piel de color Beige???
Son muy pequeñas
Mucho pelo y un tarro de hojalata para el empaque nos costará mucho dinero
Yo no creo que la gente pague 50.000 pesos por estas muñecas
Pongámosle otro nombre que no sea el mío, por qué el mio????
Abrir una cuenta para los ingresos de las muñecas??? Pero esos bancos le cobran a uno hasta la risa.
Registrarme en cámara de comercio? Deicy (mi coequipera), mejor hágale usted, no me estará haciendo meter en problemas no?
Mi mamá me preguntó que usted por qué me está ayudando en todo esto?
Todas estas frases han dejado de decirse, el mercado le está diciendo que su producto es agradable, que seguirlo haciendo no es descabellado y que puede mejorarlo más para que sus clientes amen la historia y las muñecas.
Junto con Deicy, ya tenemos un Blog con WordPress, que cuenta las historias de nuevos clientes y nuevos muñecos, tenemos una tienda en línea con Tienda Nube, otra con Mercadoshops y hacemos algo de «ruido» con Adwords. Esto ha hecho que se incrementen las ventas, aun no hemos vendido un peso a través de internet, pero si hemos conseguido muchas ventas que terminan offline luego del ingreso online.
Martha (que espero no se incomode con todas estas líneas), la codueña de todo esto, aun no tiene el conocimiento para administrar y tomar decisiones que le permitan seguir creciendo, por lo que parte de los ingresos de Marthikas, se destinarán a que acceda a una carrera técnica o profesional que le permita abrir su mente, conocer y generar las habilidades y competencias necesarias para que se apropie del negocio que en conjunto con Deicy hemos creado.
www.marthikas.com es lo que hoy es mi aporte social (por darle algún nombre), se está creciendo y lo más importante es que estamos potenciando el desarrollo económico, social, personal y familiar de Martha.
Que me motivó para escribir esto? Estuve con TECHO ayudando a construir una casa de emergencia para Doña Beatriz hace casi un mes en el barrio Ramirez. Ella tiene en su familia un esposo con limitaciones de movimiento, creo que el Señor Parra solo baja de su casa cuando tiene que ir de urgencias a la clínica (y no se si tiene acceso a eso).
Me encantaría que todos comenzaran a poner su granito de arena, sin importar la visibilidad, yo lo estoy haciendo, Martha comienza a tener diferentes aspiraciones y sueños. Tal vez pueda algún día llegar a volar.
PD: Si lo pienso con calma el trabajo que desempeño hoy, que no es un servicio social con los de la base de la pirámide, al parecer si lo termina siendo porque todas las actividades que potencien y fortalezcan el desarrollo económico del país generarán beneficios para todos sin excepción… Las grandes economías no nacieron de obras sociales, pero eso es un tema largo que no es materia de estas líneas…